Sin duda alguna ya no falta nada. Toda la vida me ha ocurrido un fenómeno que supongo que muchos compartireis conmigo.
Se trata de mi silbido. Suele aparecer hacia abril, mayo y lo hace de manera expontanea como si yo no lo pudiera controlar. Me levanto un día de la cama y sin darme cuenta me voy a trabajar silbando el riau-riau ó la canción del Aldapa ó cualquier músiquilla relacionada con las fiestas.
Parece que actúa como un engrasante cerebral. El espíritu SanFerminero que aunque vivo ha permanecido adormecido, inicia su trabajo preparándome para no dudar que el día 6 de julio deberé estar fiel a mi cita anual... y ahí estaré!!
El loco de la colina
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